El síndrome de vejiga hiperactiva tiene una base fisiopatológica compleja que implica sistemas musculares, nerviosos y multitud de intermediarios moleculares. De ahí que el tratamiento farmacológico actual, basado en los anticolinérgicos, no sea eficaz en un gran número de pacientes. En la presente revisión se explican las bases fisiopatológicas de la vejiga hiperactiva haciendo hincapié en el papel de las dianas terapéuticas como objetivo de los nuevos fármacos en desarrollo. Entre las familias farmacológicas destacan los agonistas beta, que ya son una realidad en el tratamiento de la vejiga hiperactiva; sin embargo, son muchas las posibilidades abiertas en la investigación, aunque se requieren más datos antes de llegar a su uso clínico.
